Si para algo sirvió esta cuarta visita de Oasis a la Argentina, fue para reconfirmar por cuarta vez que alguien sobra en esta banda británica. Citando a Diego, quien dijo que la selección era Mascherano y diez más, Oasis sin lugar a dudas es Noel Gallagher y compañía. Si bien su hermano Liam se lleva todas las miradas, esto se debe únicamente a su posición al frente del escenario, pero es más que claro que Noel, compositor y guitarra principal, es la piedra fundamental, el caballito de batalla, el referente y cuantos sinónimos de “líder” se le ocurran. Liam sobra.
Ante un estadio de River Plata con cerca de 45 mil personas (como no fue habilitada la popular Sívori, las imágenes televisivas pudieron mostrar un recinto aparentemente repleto) los muchachitos de Manchester pasearon esa frialdad tan inglesa que los caracteriza durante algo más de hora y media en un show breve pero efectivo. La excusa era presentar Dig Out Your Soul, el disco lanzado en octubre del año pasado y que está claramente influenciado por la psicodelia Beatle de Magical Mystery Tour. De esta forma no faltaron los tres singles lanzados hasta ahora (The Shock Of The Lightning, I´m Outta Time y Falling Down) ni otros tres temas del mismo álbum. Pero también estuvieron presentes los clásicos, desde la soberbia furiosa de Rock n´ Roll Star a las baladas épicas (punto alto en Don´t Look Back in Anger, aquella canción de (What´s the Story) Morning Glory? concebida para ser coreada por miles de personas en cualquier estadio del mundo; Buenos Aires no fue le excepción) pasando por la tierna Songbird y la perpetua Wonderwall. Para el cierre, los hermanitos Gallagher quisieron dejar en claro su admiración por los fab four de Liverpool escogiendo I Am the Walrus con distorsiones de guitarra e imágenes psicodélicas incluidas.
Asombra la firmeza musical que presenta la banda pese a su frialdad. Esto se debe en gran parte al recientemente incorporado Chris Sharrock, quien destroza la batería en enormes interpretaciones además de realizar llamativas piruetas con sus palillos. Pero también a un bajista prolijo y correcto como Andy Bell y, claro, a Noel Gallagher, que comanda todo lo que sucede sobre las tablas manteniendo su guitarra bien al frente, además de demostrar la eficacia de su voz en los temas en los que reemplaza a su hermano menor que, curiosamente, representan alrededor de la mitad del setlist.
“Vine por primera vez al estadio de River Plate en 1989, cuando era plomo, y ahora, veinte años después, puedo volver. Esto es increíble”, decía Noel en una de sus intervenciones poco antes de ser el único miembro en despedirse del público. Además soltó algunos “Muchas gracias” en forzado español que fueron bien retribuidos; no mucho más. Liam, ni eso. Evidentemente, alguien sobra.
Ante un estadio de River Plata con cerca de 45 mil personas (como no fue habilitada la popular Sívori, las imágenes televisivas pudieron mostrar un recinto aparentemente repleto) los muchachitos de Manchester pasearon esa frialdad tan inglesa que los caracteriza durante algo más de hora y media en un show breve pero efectivo. La excusa era presentar Dig Out Your Soul, el disco lanzado en octubre del año pasado y que está claramente influenciado por la psicodelia Beatle de Magical Mystery Tour. De esta forma no faltaron los tres singles lanzados hasta ahora (The Shock Of The Lightning, I´m Outta Time y Falling Down) ni otros tres temas del mismo álbum. Pero también estuvieron presentes los clásicos, desde la soberbia furiosa de Rock n´ Roll Star a las baladas épicas (punto alto en Don´t Look Back in Anger, aquella canción de (What´s the Story) Morning Glory? concebida para ser coreada por miles de personas en cualquier estadio del mundo; Buenos Aires no fue le excepción) pasando por la tierna Songbird y la perpetua Wonderwall. Para el cierre, los hermanitos Gallagher quisieron dejar en claro su admiración por los fab four de Liverpool escogiendo I Am the Walrus con distorsiones de guitarra e imágenes psicodélicas incluidas.
Asombra la firmeza musical que presenta la banda pese a su frialdad. Esto se debe en gran parte al recientemente incorporado Chris Sharrock, quien destroza la batería en enormes interpretaciones además de realizar llamativas piruetas con sus palillos. Pero también a un bajista prolijo y correcto como Andy Bell y, claro, a Noel Gallagher, que comanda todo lo que sucede sobre las tablas manteniendo su guitarra bien al frente, además de demostrar la eficacia de su voz en los temas en los que reemplaza a su hermano menor que, curiosamente, representan alrededor de la mitad del setlist.
“Vine por primera vez al estadio de River Plate en 1989, cuando era plomo, y ahora, veinte años después, puedo volver. Esto es increíble”, decía Noel en una de sus intervenciones poco antes de ser el único miembro en despedirse del público. Además soltó algunos “Muchas gracias” en forzado español que fueron bien retribuidos; no mucho más. Liam, ni eso. Evidentemente, alguien sobra.
Setlist:
Fuckin´ In The Bushes
Rock ´n´ Roll Star
Lyla
The Shock Of The Lightning
Cigarettes & Alcohol
The Meaning Of Soul
To Be Where There´s Life
Waiting For The Rapture
The Masterplan
Songbird
Slide Away
Morning Glory
Ain´t Got Nothin´
The Importance Of Being Idle
I´m Outta Time
Wonderwall
Supersonic
Don´t Look Back In Anger
Falling Down
Champagne Supernova
I Am The Walrus
Rock ´n´ Roll Star
Lyla
The Shock Of The Lightning
Cigarettes & Alcohol
The Meaning Of Soul
To Be Where There´s Life
Waiting For The Rapture
The Masterplan
Songbird
Slide Away
Morning Glory
Ain´t Got Nothin´
The Importance Of Being Idle
I´m Outta Time
Wonderwall
Supersonic
Don´t Look Back In Anger
Falling Down
Champagne Supernova
I Am The Walrus
Fotos: Leo Liberman para revista Rolling Stone
Ignacio Hutin
3 comentarios:
Nacho, te felicito por el post! Ayer fui a ver a Oasis por primera vez (y tal vez la última, ya que supuestamente se separan) y noté la gran diferencia entre los dos hermanos. Aunque toda la gente cantaba ole ole ole liam liam, la verdad q no entendí bien por qué. Me parece que tu nota es mucho más acertada que la mayoría de las crónicas del recital que salieron en los diarios hoy. Lo único q no se si a vos te pareció lo mismo, a mi me dio la senasación que River les quedó un poco grande, como que el campo estaba hasta la mitad, y tal vez, el escenario un poco chico tb. Tal vez en un estadio más chico se hubiera sentido distinto.
Saludos
Lujan
Gracias por las felicitaciones!
yo no me creo ni un poco eso de que se van a separar, estos pibes se viven peleando y desde que salió su primer disco se viene diciendo que se van a separar. me parece que fue mas una movida de prensa.
lo de river ya se sabía que les quedaba enorme, igual las plateas altas estaban repletas. no sé cómo estaba el campo porque no lo pude ver de arriba, pero sí había mucha gente. sin duda el lugar perfecto hubiera sido velez (que tiene capacidad para 40/45 mil) pero tanto velez como ferro son de fenix asi que quedaban descartados los dos. podrian haber hecho boca pero es demasiado inaccesible.
de paso, yo leí solo dos notas sobre este recital, una en rolling stone y otra en clarin, esta última la hizo pablo schanton y es más que recomendable.
saludos!
Excelente post! Me quedé con las ganas de verlos y me tuve que conformar con el programa de Bebe ayer en Canal 13.......
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